Aprovechando el recorrido de una de las rutas de nuestra guía turística «Barcelona: descubriendo rincones escondidos y las mejores curiosidades», hoy vamos a continuar nuestra vuelta por el barrio Gótico, ubicado en el centro histórico de Barcelona.
Tras descubrir juntos algunos de los encantos escondidos de este barrio, en nuestra “Ruta Barrio Gótico Parte I”, seguiremos desvelando secretos de este histórico lugar. En esta segunda parte, profundizaremos aún más en el tiempo y el espacio para explorar sitios menos conocidos pero igualmente fascinantes.
Desde los vestigios de la antigua Roma hasta las sombrías marcas de la guerra civil, cada rincón del Barrio Gótico tiene una historia que contar. Acompáñanos en este viaje por la historia de la ciudad Condal y descubre por qué Barcelona nunca deja de sorprender… ¿Estás listo para seguir con la aventura? ¡Comenzamos!
Ruta Gótico Parte II
En esta segunda parte de nuestro recorrido, exploraremos desde el punto 5 hasta el 8.
Puedes ver la ruta completa en google maps aquí
5) El templo romano escondido
Ahora nos transportamos aún más atrás en el tiempo, a la época antigua y al esplendor del Imperio Romano. En el Carrer Paradís no 10, donde ahora se ubica el Centre Excursionista de Catalunya, se encuentra una joya perdida del barrio Gótico. Se trata de los restos originales del foro romano de Barcino, dedicado al emperador César Augusto.
Una maravilla arquitectónica del siglo I a.C. dedicada al primer emperador romano. Este templo, situado en el punto más alto de la ciudad antigua, el Mont Taber, servía como centro político y religioso, reflejando la grandeza y la influencia de Roma en sus territorios.
6) Heridas de la guerra civil
Continuamos nuestro recorrido, y en nuestra siguiente parada viajamos a la edad contemporánea, a la trágica época de la guerra civil española, que asoló el país de 1936 a 1939.
Nos encontramos en el rincón más tranquilo y solitario de Barcelona, marcado profundamente el 30 de enero de 1938, cuando las tropas del bando nacional lanzaron una bomba que devastó este hermoso lugar. La explosión resultó en 42 víctimas mortales, la mayoría niños que se encontraban en la escuela, aún presente en la plaza.
La mayor curiosidad de la plaza son las erosiones causadas por el bombardeo, en el Oratorio de San Felipe Neri y el Colegio San Felipe Neri. Estas marcas no solo reflejan el impacto físico del conflicto, sino que son un recordatorio visual de esta tragedia.
7) La única sinagoga de Barcelona
La Sinagoga Mayor de Barcelona, situada en el antiguo barrio judío, el Call, es una de las más antiguas en Europa, remontándose al siglo VI.
Esta dejó de ser utilizada como tal principalmente debido a las persecuciones que sufrió la comunidad judía en la ciudad, especialmente en el siglo XIV, llevaron al abandono y posterior uso diverso del edificio a lo largo de los siglos.
Durante los últimos siglos, este edificio se ha utilizado como tintorería y como depósito de materiales eléctricos. Finalmente l’Associació del Call de Barcelona recuperó este espacio dándole el uso inicial de sinagoga mayor.
8) Monumento als Castellers
📍Plaça de Sant Miquel
Y para finalizar nuestro recorrido por el Barrio Gótico, terminamos en un monumento a una de las tradiciones catalanas más importantes y simbólicas. Este monumento fue construido en honor a los «castellers», es decir a las personas que forman parte de los equipos que construyen los “castells” o torres humanas, una práctica que simboliza la fuerza colectiva, el equilibrio y el coraje. Participan personas de todas las edades, que se organizan en equipos para formar estructuras complejas y altas. Esta actividad se realiza en festividades y competiciones, destacando la cooperación y el espíritu comunitario.
Al pie de esta estructura construida el 2012 en Plaça de Sant Miquel, se preparan los equipos de castellers antes de las grandes actuaciones en la Plaça Sant Jaume. La escultura, formada por unos finos tubos de acero entrelazados en forma de torre cilíndrica, pretende expresar la fragilidad y la fuerza de unas torres humanas que se levantan con mucha voluntad y siempre tiemblan.
A pesar de representar a los castellers (Patrimonio de la Humanidad), la escultura recibió muchas críticas de la opinión pública debido a su elevado coste ¡630.000 Euros!
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