Hoy queremos que nos acompañes a la Casa Vicens, situada en el barrio de Gràcia. Se trata de una de las joyas del modernismo barcelonés y, curiosamente, la primera gran obra de Antoni Gaudí. Construida entre 1883 y 1885, esta casa marca el inicio de la carrera de uno de los arquitectos más importantes del mundo. En ella, Gaudí comenzó a explorar muchas de las ideas y estilos que desarrollaría más adelante en obras como la Sagrada Familia o el Parc Güell, convirtiéndola en una pieza clave para entender su evolución artística.
Gaudí en 1878, fotografiado por Pau Audouard
Contexto histórico y arquitectónico:
La Casa Vicens fue encargada por Manuel Vicens i Montaner, un corredor de bolsa, para ser su casa de verano. En aquella época, el barrio de Gràcia no formaba parte del centro de Barcelona, sino que era una villa independiente, y muchos barceloneses adinerados tenían allí sus residencias secundarias para disfrutar de la tranquilidad que ofrecía.
Este edificio es una obra fundamental dentro del modernismo catalán y, a la vez, muestra la influencia de las corrientes arquitectónicas que predominaban a finales del siglo XIX. En la Casa Vicens, Gaudí aún estaba definiendo su propio estilo, y por eso verás una mezcla de elementos orientalistas y neomudéjares junto con los primeros indicios de las formas orgánicas que más adelante serían su sello distintivo.
Detalles arquitectónicos:
Lo primero que te llamará la atención al ver la Casa Vicens es el uso del azulejo cerámico. La fachada está cubierta de brillantes tejas de colores verde y blanco, decoradas con motivos florales que representan las caléndulas, una planta que crecía en el terreno donde se construyó la casa. Gaudí, siempre inspirado por la naturaleza, decidió rendirle homenaje incorporando este diseño en la fachada.
Otro aspecto clave es el uso de ladrillo visto y los detalles en hierro forjado, que Gaudí utilizaría en muchas de sus obras posteriores. Las rejas, por ejemplo, están adornadas con hojas de palma, un motivo que se repite en otros edificios suyos. Esta atención al detalle y su amor por la naturaleza fueron características constantes en su trabajo.
La casa también tiene una clara influencia del estilo mudéjar, que se puede ver en los arcos y las decoraciones interiores. Las ventanas enrejadas, las cúpulas y los balcones de hierro, todos con formas geométricas, evocan la arquitectura islámica que Gaudí admiraba.
Historias y curiosidades:
- El jardín desaparecido: Aunque hoy la Casa Vicens se encuentra entre edificios urbanos, originalmente estaba rodeada de un jardín exuberante. Gaudí diseñó todo el espacio exterior pensando en crear un pequeño paraíso natural, con fuentes y plantas. Sin embargo, con la urbanización del barrio de Gràcia y las sucesivas modificaciones, gran parte de este espacio verde se perdió.
- Un espacio privado por muchos años: Durante más de un siglo, la Casa Vicens fue una residencia privada y no estuvo abierta al público. La familia Jover, que la adquirió en 1899, la habitó hasta 2014. Fue solo entonces cuando se restauró y se abrió como museo, permitiendo a los visitantes admirar el trabajo de Gaudí desde su primer gran proyecto.
- Los techos artesonados: Al entrar a la Casa Vicens, te sorprenderá la belleza de los interiores, especialmente los techos artesonados que Gaudí diseñó. En la planta baja, los techos están pintados con motivos florales y vegetales, una clara muestra de su interés por integrar la naturaleza en sus diseños. En cada sala, hay un motivo diferente, lo que hace de la visita una experiencia visual fascinante.
- Influencia oriental: Gaudí estaba profundamente influenciado por el arte y la arquitectura oriental, algo que es evidente en la Casa Vicens. Las formas y decoraciones recuerdan a los edificios de la arquitectura islámica que había estudiado. Esta mezcla de estilos era típica del modernismo, que buscaba romper con las normas académicas del neoclasicismo e incorporar nuevas ideas.
- La casa y la polémica con los vecinos: A pesar de su belleza, la construcción de la Casa Vicens no estuvo exenta de controversia. El uso de viviendas de verano en Gràcia era algo exclusivo de las clases altas, lo que generó algunas críticas entre los vecinos del barrio, que en ese momento era una zona más popular y humilde. Con el tiempo, la casa se integró en la vida del barrio, pero al principio fue vista como un símbolo de ostentación.
Restauración y apertura al público:
La Casa Vicens abrió sus puertas al público en 2017, tras una cuidadosa restauración que respetó el diseño original de Gaudí. Durante esta restauración, se descubrieron y restauraron muchas de las pinturas y detalles que habían sido cubiertos o alterados a lo largo de los años. Hoy, al visitarla, puedes recorrer sus tres plantas, disfrutar de las decoraciones interiores, y conocer más sobre la historia del edificio y del barrio de Gràcia.
Además, ahora la casa alberga exposiciones temporales relacionadas con la historia del modernismo y la obra de Gaudí, lo que la convierte en una parada obligatoria para los amantes de la arquitectura.
La Casa Vicens es una obra que nos permite entender los primeros pasos de Gaudí y cómo fue evolucionando hacia un estilo propio que, más adelante, lo consagraría como uno de los arquitectos más innovadores de la historia. Es fascinante pensar que muchos de los elementos que aquí vemos en forma de “experimentos” los encontraríamos luego en sus obras maestras, como el uso de azulejos, la inspiración en la naturaleza y la libertad de formas.
Si eres amante del modernismo, tienes una parada obligada en este monumento. Aquí tienes toda la información para planificar tu visita:
Horarios de visita:
De abril a octubre: Lunes a domingo de 9:30 am a 20:00 pm
De noviembre a febrero: Lunes a domingo de 9:30 am a 18:00 pm
Cierre: La Casa Vicens permanecerá cerrada el 25 de diciembre y del 7 al 15 de enero de 2025, incluidos.
Duración de la visita: aproximadamente 1h 15min.
Taquilla abierta: La taquilla estará abierta desde la apertura hasta 1h 15min antes del cierre.
Último acceso: El último acceso será 1h 15min antes del cierre de la Casa. El desalojo del recinto comenzará 15 minutos antes del cierre.
Precios de las entradas:
- Entrada general: 20 € por persona.
- Entrada reducida (mayores de 65 años, estudiantes, personas con discapacidad y residentes de Barcelona): 18 €.
- Entrada gratuita: Gratuita Niños hasta 11 años, acompañante de persona con diversidad funcional y miembros del Club SX3.
Además, hay visitas guiadas disponibles, que ofrecen una experiencia más completa, con guías especializados que te contarán en profundidad la historia y detalles del edificio.
Dónde comprar las entradas:
- En línea: La forma más recomendable es comprarlas a través de la web oficial de Casa Vicens. Esto te permitirá seleccionar tu día y hora de visita con antelación y evitar filas.
- En taquilla: También puedes adquirir las entradas directamente en la taquilla de la Casa Vicens, aunque es preferible la compra online, especialmente en temporadas altas.
Visitar la Casa Vicens es una oportunidad única para descubrir los primeros pasos de Gaudí y sumergirte en la magia del modernismo catalán. Si estás planeando tu visita a Barcelona, no te pierdas este fascinante monumento. Y recuerda, en Hostemplo, te ofrecemos la comodidad de estar a pocos minutos de las grandes joyas modernistas de la ciudad. Además, si reservas directamente en nuestra web, ¡el desayuno de tu primera noche corre por nuestra cuenta! ¡Te esperamos para hacer de tu estancia una experiencia inolvidable!